- Esta perra no está bien. (Otras veces dicen: la moco no está bien. Manda huevos)
- Qué le has notado?
- No sé, está rara. Lleva hecha un ovillo toda la mañana. (Como que no puedo más de dolor de estómago)
- No ha ladrado cuando he vuelto a casa, ni me ha venido a buscar a la puerta. (¡¡Pero si no me puedo ni mover!!) Eso sí, la galletita se la come aunque se esté muriendo.
- Será la pastilla de ayer? (Pues claro, ¿qué va a ser? A veces pienso que no sois muy inteligentes. Me podíais haber dado un Omeprazol antes. Además de la pastilla "matabichos" intestinales, me habéis calzado el collar antipulgas. ¿Qué más queréis? Y sé que tuve pulgas el año pasado, pero ¿me lo tenéis que recordar toda la vida? Ya, yaa, hubo que fusfrisear toda la casa y os "emparanoiasteis" con que os picaba todo, sí, síiii. Y, de hecho, las tenía. Pero mira, a mi amiga Quequi, la gaditana, sólo le han puesto una pipeta)
- Es probable. Ha vomitado esta noche.
- He estado a punto de llamarte para llevarle a la veterinaria. (NOOOOOOOO, por favor, os lo suplico, me estoy encontrando mejor por momentos. Por aquí no se ve ni una puñetera pulga. Tengo la piel sana y salva de huevecillos.)- No te preocupes, ya se le pasará. (Uffff)
uyyyyy qé malita estás, enroscada como un ovillo, la culpa es de es@s de la bata blanca, cada vez que vamos venga a tomar porquerías.
ResponderEliminarYo tengo suerte (de momento ) sólo me ponen esa pipeta; y bueno, eso no duele. Ahora que siempre la huelo bien antes ...¡soy muy desconfiado !
¡ponte buena pronto...guau...guau.
Un lametón, Nora.
Que tierna asi enroscadilla :)
ResponderEliminar¡Cómo cambiarían los humanos si pudieran leer nuestros pensamientos, Nora! A mí me dieron en cierta ocasión una pastilla antibiótica y la vomité dos veces. ¿No se dieron cuenta de que me sentaba mal?
ResponderEliminarEn fin, ánimo, Nora.
Besitos.